Quienes somos y qué queremos conseguir
La Asociación Española de Jugadores de Apuestas Deportivas nace con el objetivo de representar a todos los usuarios en apuestas deportivas, de modo que podamos tener la fuerza suficiente frente a los abusos de las casas de apuestas.
Aspiramos a ser la voz de los jugadores en apuestas deportivas, para que los legisladores y la DGOJ tengan en cuenta nuestro punto de vista.
También queremos servir de palanca, para transmitir frente a la prensa y al resto de la sociedad, una imagen sana de una actividad tan estigmatizada como las apuestas deportivas, pero que, para nosotros, tiene valor tanto como una actividad lúdica, como también una posible y lícita manera de obtener rentabilidad.
Tenemos la intención de mostrar el punto de vista de los jugadores, sobre los temas más importantes que nos afectan, y los problemas que encontramos al realizar esta actividad.
Nuestros pilares serán
1. Que los jugadores estén informado sobre los riesgos de apostar.
2. Que el juego sea justo y se cumpla la legislación vigente.
3. Que el juego se realice de forma responsable y prevenir sobre malos hábitos, fraude o conductas ilegales
4. Que el juego sea seguro
Una incomoda realidad
Hay una realidad innegable y es que, así como las casas de apuestas están asociadas entre sí (JDigital), cuentan con prensa especializada de su sector (Sector del juego, Infoplay) organizan ferias del juego (Expojoc, Figma), y defienden sus intereses a capa y espada, frente a la corriente anti-juego de nuestros gobernantes, no ocurre lo mismo con el usuario en apuestas deportivas.
Actualmente, no tenemos ninguna representación como usuarios en apuestas deportivas, y eso nos debilita.
En ese sentido, necesitamos tener una organización, que nos represente frente a las casas de apuestas y a la administración, y por eso nace AEJAD
Queremos exigir a la DGOJ, que proteja a los usuarios , no solo frente al juego ilegal, fraudes y ludopatía, si no también contra el abuso de la posición privilegiada que ahora mismo ostentan las casas de apuestas, que imponen sin posibilidad de negociación por parte del usuario, los Términos y Condiciones de los contratos de adhesión del juego.
Además y aquí viene el plato fuerte.
Lo que se ha podido demostrar durante estos años es que, la administración pública, la que nos debería proteger como usuarios y consumidores, no hace nada, se pone de perfil y aboca a los usuarios a la vía judicial en caso de cualquier conflicto con la casa de apuestas.
La administración pública, considera que estos abusos exceden de su competencia, siendo el contrato de apuestas una relación privada entre el usuario y la casa de apuestas
¿Y qué supone esto en la práctica?
Con este panorama, como jugadores estamos absolutamente solos ante cualquier abuso que las casas de apuestas cometen contra nosotros y también nos sentimos así, de cara a los organismos públicos como la DGOJ.
No recibimos ningún apoyo y antes cualquier problema, solo nos ha quedado la opción de recurrir a la vía judicial.
Lo que no te cuentan de todo esto, es que, realmente las casas de apuestas buscan clientes que apuesten como quien juega a la lotería.
Nos “pintan” como supersticiosos o forofos del deporte o avariciosos que queremos llevarnos un bote con un golpe de suerte, mientras que la realidad es que las apuestas son una actividad lúdica como cualquier otra, que en ciertos casos también puede ser rentable
Nadie compra un boleto de lotería sólo por diversión, si no también por el inherente interés económico de ganar el premio.
Pues con las apuestas pasa lo mismo.
En resumidas cuentas, a la administración, a través de la DGOJ, lo que más le preocupa es que no escape ningún euro del fisco.
A cambio ofrece una supuesta “protección” mediante el juego seguro que garantizan mediante el otorgamiento de licencias a las casas de apuestas.
Con esto se garantizan una mayor recaudación impositiva, ya que los pocos jugadores que ganan tributan sus ganancias como ganancias patrimoniales sin posibilidad de ninguna desgravación.